A raíz de la grave situación económica y social, muchas familias deben recurrir a comedores, merenderos y ollas populares para obtener un plato de comida. Y los más vulnerables son los más pequeños, que necesitan una dieta balanceada y acorde a sus necesidades. Sin embargo, un estudio realizado por la organización Barrios de Pie reveló que, de un total de 6.700 chicos, un 43,7 por ciento están con malnutrición y, en algunos casos, llegan a la desnutrición infantil, contra un 40 por ciento registrado el año pasado. Esto despertó, nuevamente, la preocupación sobre la salud infantil.

En comunicación con El1 Digital, Sandra Oviedo, referente de la organización, indicó: “Junto con las promotoras del área de Salud local, hacemos mediciones y pesamos a los niños y adolescentes de hasta 19 años que asisten a los merenderos que ayudamos, es decir, más de 240”. “Hay un alto riesgo nutricional por sobrepeso y bajo peso, ya que los chicos se alimentan a base de hidratos de carbono”, señaló.

“En el último estudio, que se hace semestralmente, encontramos un índice de bajo peso en aumento, con datos cuantitativos de alrededor de 300 casos que detectamos, y acercamos este trabajo a la Secretaría de Salud, porque la situación económica es peor y estos chicos están a pocos pasos de llegar a la desnutrición”, explicó. Además, remarcó que los médicos que van a los merenderos, junto con una trabajadora social, para hacer un seguimiento integral: los revisan, hacen extracciones de sangre para saber la causal del bajo peso, desnutrición y comprueban si tienen parásitos, por lo cual no puedan asimilar los alimentos que consumen.

“Los relevamientos se realizaron en las localidades de Virrey del Pino, González Catán, Gregorio de Laferrere y Rafael Castillo, y realizaremos en Villa Celina, todo el tercer cordón, las zonas más vulnerables. Los propios resultados aseguran que, en Castillo, está la mayor cantidad de gente con mal nutrición y bajo peso”, afirmó. Además, según indicó Oviedo, más de 8.000 menores asisten a los comedores que ayuda Barrios de Pie. “En promedio, se acercan cien personas”, sostuvo, y agregó que la situación actual es preocupante a nivel social y económico.

Por otra parte, comentó que llevan a cabo ollas populares en diferentes barrios de las localidades de Isidro Casanova, Rafael Castillo y Gregorio de Laferrere. “Muchos vecinos nos han pedido colaboración por la gente en situación de calle, y esto nos impactó”, mencionó. También, colaboran con escuelas ya que los docentes dijeron que hay alumnos que se han desmayado por no haber recibido una buena alimentación. “Un chico con hambre es imposible que preste atención y pueda tener un buen proceso de aprendizaje”, alertó.

Fuente: El1Digital