Finalmente llegó el histórico día en que el Congreso votará por sí o por no en torno al proyecto de interrupción voluntaria del embarazo. Aquí, compartimos la reflexión de la congresista nacional Mónica Macha, la dirigente moronense que es una de las firmantes del proyecto de ley de Aborto Seguro, Legal y Gratuito.
Redacción El diario // Miercoles 13 de junio de 2018 | 09:34
Por Mónica Macha *
El inmenso trabajo realizado por un colectivo feminista amplio y diverso, permitió que el debate en torno a la necesidad de legalizar el aborto llegue hasta este punto institucional que es el tratamiento en el recinto del Congreso. Pero sobre todas las cosas logró que el tema ganara la agenda pública y tuvo lugar un fenómeno que no suele verse muy seguido: fue la sociedad la que le impuso la agenda a los medios, a las instituciones, a cierta dirigencia política y a gran parte de la intelectualidad de nuestro país.
Por eso estoy convencida de que estamos asistiendo a uno de esos momentos de la historia en que es necesario que las instituciones logren estar a la altura del debate impuesto por el Pueblo. Y para estar a esa altura, es indispensable que se conozcan las razones del Pueblo para impulsar la discusión. En este caso las razones fueron expuestas y de manera desgarradora, para que nadie tenga ninguna duda: las mujeres se están muriendo por la ilegalidad del aborto, hay un grave problema de salud pública fomentado por la condición de ilegalidad, que implica desregulación, criminalización, desatención y sobre todo injusticia.
Sabemos que cualquier mujer que decida practicarse un aborto, por el sólo hecho de tratarse de una práctica ilegal, ya está en peligro. Ahora, mientras las mujeres con mayores recursos acceden a condiciones más seguras, las de menos recursos arriesgan sus vidas y muchas mueren.
El Estado no puede mirar para otro lado y debe responder con una política pública a esta situación. Quienes tenemos la enorme responsabilidad de legislar no podemos cavilar en creencias religiosas y posturas personales. Debemos debatir sabiendo que estamos abordando un asunto de interés público y que no tiene que existir lugar para la doble moral en estos temas.
También es fundamental que el debate se pueda dar en libertad, sin ningún tipo de presiones, para que todxs lxs legisladorxs, de todas las provincias puedan expresarse de la manera que crean correcta con su voluntad intacta.
Desde mi lugar como Diputada, pero por sobre todas las cosas, como militante del feminismo siento que es muy importante el lugar al que hemos llegado, que estamos haciendo historia y que vamos a profundizar eso al convertir en ley el derecho al aborto legal, seguro y gratuito. Porque el aborto legal es justicia social.
(*) Diputada Nacional por Buenos Aires de Unidad Ciudadana.
Texto publicado en Ámbito Financiero.