Ante las temperaturas extremas, es importante tener en cuenta:

Aumentar el consumo de agua y evitar bebidas alcohólicas, azucaradas o calientes,

No exponerse al sol si no es necesario y evitar hacerlo entre las 11 y las 17hs,

Usár protector solar, ropa clara y liviana, gorra y anteojos oscuros,

Evitar comidas abundantes y pesadas y preferí el consumo de frutas y verduras,

Reducir la actividad física, sobre todo en los horarios de mayor calor,

Permanecer en espacios frescos y ventilados o acondicionados.

Es importante recordar que hay que extremar las medidas de cuidado y prevención en las personas mayores de 65 años y los niños y niñas, ya que para estos grupos de riesgo el efecto en la salud es mayor.

Mantenerse en reposo y bien hidratado en un lugar fresco ante la presencia de uno o más de los siguientes síntomas:

Sudoración excesiva

Piel irritada, pálida y/o fresca

Sensación de calor sofocante

Sed intensa

Calambres musculares, agotamiento, cansancio o debilidad

Dolor de estómago, inapetencia, náuseas o vómitos

Dolor de cabeza

Si los síntomas empeoran y se suman:

Fiebre mayor a 39°

Piel roja, caliente y seca

Respiración y frecuencia cardíaca acelerada

Mareos, desmayo, vértigo, delirio o confusión

Convulsiones

Acudir de inmediato a uno de los Centros de Atención Primaria de la Salud, que podés conocer en este enlace https://bit.ly/3LZnrGl

Es importante no automedicarse, ni siquiera con antifebriles. Como no existen medicamentos para tratar el golpe de calor, la prevención es la única herramienta que tenemos para combatirlo.