Fue madre de María de Lourdes Noia de Mezzadra, psicóloga, docente universitaria, militante del Movimiento Villero Peronista (MVP) en la Villa del Bajo Belgrano y también del Movimiento de Inquilinos Peronistas (MIP). Su actividad sindical en el gremio de docentes lo realizó a través de la Juventud Trabajadora Peronista (JTP). María de Lourdes fue secuestrada el 13 de octubre de 1976 en su domicilio del Barrio de San Cristóbal junto a su marido, Enrique Mario Mezzadra. Fueron llevados a la Escuela Mecánica de la Armada (ESMA). Enrique fue liberado el 21 de octubre de 1976. Hasta la fecha, María de Lourdes permanece desaparecida.

Pepa vivió en Castelar y trabajó de obrera textil en esa localidad. El 13 de octubre de 1976 sufrió el secuestro de su hija Lourdes, psicóloga y profesora de la Universidad de Morón.