Un clásico con escaso relieve y escaso de emociones jugaron Deportivo Morón y Almirante Brown, que con realidades distintas repartieron los puntos (0 a 0) en el Nuevo Francisco Urbano. La fiesta la puso la gente en las tribunas, cantando, alentando y festejando el campeonato logrado por El Gallo.
Por Charly Artesi // Miercoles 21 de junio de 2017 | 09:08
La verdadera fiesta fue antes de comenzar el partido. En una sencilla pero emotiva ceremonia el presidente de la AFA Carlos Tapia le entregó a Dep. Morón la Copa de Campeón.
Ya en el campo de juego cada uno de los jugadores campeones recibieron sus correspondientes medallas y también la Copa.
Todos juntos dieron la vuelta olímpica ante la felicidad de su gente y la apatía e irrespetuosidad de los dirigentes y familiares visitantes que al paso de los jugadores les dieron la espalda.
Deportivo Morón suma 16 partidos invicto de local y sigue festejando el tan merecido ascenso a la B Nacional.